Mi regreso del Congreso Mundial de Cardiología

Lo más destacado y cómo puede transformar la medicina en Bolivia

Dr Gesiel Castillo

9/10/20254 min read

He regresado recientemente del Congreso Mundial de Cardiología 2025, un encuentro que reunió a los especialistas más reconocidos del mundo para debatir los avances más recientes en prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. Participar de este evento ha sido un honor, pero sobre todo una gran responsabilidad: traer a Bolivia lo mejor de la ciencia global y traducirlo a nuestra realidad médica, cultural y social.

La inflamación vascular: el enemigo oculto en nuestros pacientes

Uno de los ejes centrales del congreso fue el rol de la inflamación crónica en la formación de placas arteriales. La evidencia es clara: muchos pacientes con colesterol normal igualmente sufren infartos, y la razón está en el daño inflamatorio del endotelio.

La PCR ultrasensible (hs-CRP) se presentó como herramienta de detección temprana. Si pensamos en Tarija, donde la hipertensión, la obesidad abdominal y la enfermedad de Chagas son altamente prevalentes, esta prueba tiene un valor aún mayor.

  • En comunidades rurales del Valle Central, donde los pacientes no acceden a chequeos regulares, un estudio de inflamación podría identificar a personas que parecen “sanas” pero están en riesgo real.

  • Incluso en jóvenes tarijeños con antecedentes familiares de infartos tempranos, aplicar este biomarcador permitiría prevenir décadas antes de que la enfermedad se manifieste.

En Bolivia, todavía no se ha incorporado la hs-CRP en protocolos de rutina, pero aquí veo un camino para cambiar la práctica clínica: usar la inflamación como parámetro base en la prevención cardiovascular, no solo en investigación, sino en la consulta diaria.

Medicamentos innovadores: más allá de la diabetes

Los agonistas del receptor GLP-1, como la semaglutida y la tirzepatida, fueron protagonistas en el congreso. Lo sorprendente no es solo su eficacia en bajar peso y controlar la glucosa, sino su efecto directo en reducir infartos, arritmias y hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca.

¿Cómo se traduce esto en Tarija?

  • Pienso en pacientes con obesidad abdominal y presión alta, donde la dieta tradicional rica en carnes y frituras hace difícil el control metabólico. Estos fármacos podrían cambiar radicalmente la historia clínica de estas personas, reduciendo no solo su peso, sino su riesgo de muerte súbita.

  • También en mujeres postmenopáusicas, muchas con resistencia a la insulina, donde la introducción de estos medicamentos podría prevenir complicaciones futuras y mejorar su calidad de vida.

A nivel nacional, la implementación de GLP-1 en protocolos oficiales aún no existe, pero desde mi experiencia puedo afirmar: estos medicamentos no deben verse solo como terapias metabólicas, sino como herramientas cardiológicas de primera línea.

ApoB: la lupa que revela riesgos invisibles

En el congreso quedó claro que el colesterol total ya no basta. La Apolipoproteína B (ApoB) mide cuántas partículas dañinas circulan en la sangre, y predice mejor el riesgo que cualquier análisis tradicional.

Ahora bien, en la práctica, ¿qué implicaría aplicar ApoB?

  • Muchos trabajadores agrícolas que llevan una vida físicamente activa, suelen creer que están fuera de riesgo. Sus análisis de colesterol aparecen normales, pero al medir ApoB descubriríamos que el daño silencioso ya está en marcha.

  • Pacientes con Chagas, incluso sin alteraciones lipídicas, podrían mostrar partículas aterogénicas elevadas. Aquí ApoB no solo serviría como marcador, sino como nuevo criterio de estratificación del riesgo en cardiopatía chagásica, algo que aún no se ha planteado en la cardiología boliviana.

Este enfoque puede revolucionar el screening en el país: dejar de basarnos únicamente en cifras de colesterol y empezar a mirar la calidad real de las partículas circulantes.

Prevención integral adaptada a nuestra cultura

El mensaje del congreso fue contundente: ningún medicamento reemplaza al estilo de vida. Pero adaptar la prevención a nuestra realidad es la clave.

  • En Tarija, la dieta rica en carnes rojas, embutidos y sal no puede cambiarse de un día para otro. Pero sí podemos empezar a introducir programas educativos que incluyan alternativas locales más sanas como la quinua, la papa o frutas del valle.

  • El consumo de alcohol, tan ligado a nuestra cultura festiva, debe ser discutido con los pacientes no desde la prohibición, sino desde la moderación y el cuidado de la salud.

  • Y el sedentarismo urbano, especialmente en jóvenes, puede enfrentarse con campañas que promuevan caminatas y ejercicio accesible en plazas y barrios.

La verdadera revolución preventiva será cultural: traducir la ciencia a cambios sostenibles que nuestra gente pueda adoptar sin sentirse ajena a su estilo de vida.

Un impacto nacional

Lo aprendido en este congreso no es teoría: es aplicable en toda Bolivia.

  • PCR ultrasensible: debe ser incorporada en protocolos nacionales de prevención.

  • ApoB: puede redefinir la forma en que diagnosticamos riesgo en pacientes aparentemente sanos.

  • GLP-1: representan una terapia innovadora que debe estar disponible para quienes combinan obesidad, diabetes e hipertensión.

Pero más allá de la tecnología, este congreso refuerza la idea de que Bolivia necesita una cardiología preventiva, científica y culturalmente adaptada.

Mi regreso del Congreso Mundial de Cardiología me confirma que no estamos condenados a vivir con el peso de los infartos y las enfermedades del corazón. Hoy tenemos nuevas herramientas: biomarcadores que revelan riesgos ocultos, medicamentos que ofrecen protección más allá de lo esperado y estrategias de prevención integral que podemos aplicar en nuestra gente.

Como cardiólogo y como presidente de la Sociedad Tarijeña de Cardiología, mi compromiso es claro: adaptar la ciencia mundial a la realidad boliviana, con propuestas que todavía ningún cardiólogo en el país ha puesto sobre la mesa, y que pueden marcar un antes y un después en la salud de nuestra población.

💙 Si tienes factores de riesgo o simplemente quieres conocer mejor la salud de tu corazón, este es el momento de dar el primer paso hacia la prevención.